Buenos días mi amor – Angélica García
BUENOS DÍAS MI AMOR
Dios hizo al ser humano a imagen y semejanza suya. Lo hizo con amor y para dar y recibir amor. El amor sea de pareja, sea de familia, sea de amistad, etc. es un regalo de Dios. Sin el amor en nuestras vidas, seríamos simples seres vivientes. Él dijo que no era bueno que el hombre estuviera solo y le proporcionó compañía, así Dios instituyó el matrimonio. Es una lástima que en estos días, el matrimonio está siendo pisoteado. Las parejas se casan, teniendo en mente que si no funciona, se divorcian y listo, a buscar a otro u otra. Este no estaba en la mente de Dios cuando creó la primera pareja. El la creó para amarse toda la vida. Muchos piensan que esto no es posible, pero si Dios lo previó así es que sí es posible.
¿Por qué una pareja que se casó muy enamorada aparentemente, termina en divorcio y odiándose mutuamente? Hay muchos factores que pueden provocar que la pareja termine de este modo: celos, infidelidad, falta de compatibilidad, problemas económicos, etc. Pero todo esto tiene solución, Dios es esa solución. Él es quien puede volver a unir los corazones. El problema es que cuando una pareja llega a estos extremos, es justamente porque Dios no está gobernando su matrimonio, es decir, no toman en cuenta a Dios en su vida. Dios tiene reglas que si todas las parejas de este mundo, las siguieran no existiría el divorcio, porque simplemente no existirían motivos para el mismo.
El amor se puede conservar para toda la vida, empezando desde la mañana de cada día. Como se saluda una pareja en las mañanas, dice mucho de ella. Se deben saludar con cariño cada día. Lo contrario, predispone al disgusto y al resentimiento durante el resto del día, puede suscitarse cualquier situación en la que aflore ese resentimiento y ahí vienen las discusiones y los pleitos. Los detalles tienen mucha importancia en la pareja, así que es importante el saludo cariñoso de las mañanas. Muchas parejas ni siquiera saben cómo es que llegaron a tenerse tanto rencor. Es que olvidaron los detalles en su matrimonio. Olvidarse de los detalles, trae monotonía al matrimonio, aburrimiento, tedio y es fácil que caigan en infidelidad.
Las parejas detallistas son las parejas más felices. Un «¡Buenos días mi amor!», un desayuno a la cama, nunca va a ser mal acogido y alegrará el corazón del esposo. Un corazón alegre es lo que hay que mantener en el matrimonio. Los problemas inevitables de la vida cotidiana, serán menos agobiantes cuando la pareja se sabe unida y con un corazón alegre.
Las muchas aguas no podrán apagar el amor, Ni lo ahogarán los ríos. Si diese el hombre todos los bienes de su casa por este amor, De cierto lo menospreciarían. Cantar de los Cantares 8:7
Escrito por: Angélica García Sch.
Para: www.mujerescristianas.org